miércoles, 6 de mayo de 2015

Resumen vacacional

No, por una vez no hablo de las vacaciones en Londres (aún me queda un post por publicar, no cantéis victoria, jijiji), sino de una semana de vacaciones que termina hoy y que necesitaba como agua de mayo, nunca mejor dicho.

Este blog está reflejando mi ánimo general para cualquier cosa y mi trabajo lo agrava todo debido al cansancio físico que me causa. Vale, no me quejaré mucho más porque tengo trabajo y eso es un bien escaso en los tiempos que corren, pero pagaría por tener constantemente esta sensación de relax y desconexión que he vivido esta semana de vacaciones. Y eso a pesar de estar lesionada y de no poder hacer muchas de las cosas que me proponía.

En la parte positiva, he de decir que las lanas han vuelto a mí! No trabajar estos días ha supuesto una mejora física sustancial: el cansancio desapareció esta semana y el pinzamiento del nervio de mi mano derecha me ha dado tregua. La mano se me ha entumecido mucho menos estos días y eso me ha permitido ganchillar de nuevo. Con un pequeño empujoncito anímico por parte de algunas personas que me rodean he conseguido que los ozitos de amigurumi vuelvan a hacer acto de presencia. 

En la parte negativa, un persistente dolor en un dedo del pie izquierdo se ha revelado finalmente como una fisura. Diez días de entablillado, inmovilización forzosa y reposo han evitado que pudiera acometer muchos de los proyectos pendientes para estas vacaciones. El dedo todavía no está bien pero hoy me toca reincorporarme al trabajo y confiar en que al menos no empeore la cosa. 

En resumen?: cené con amigos, comí con amigos y tomé café y cervezas con amigos; leí todo lo que pude del "Sandman" de Neil Gaiman; vi capítulos de "Supernatural", "Game of Thrones" e "Inside nº9"; ganchillé ozitos de amigurumi; le hice fotos a River; dormí mucho; comí demasiado; perpetré dos bizcochos fallidos; compré gravilla para mi jardín vertical; cogí a bebés en brazos; compré libros; vi programas aleatorios de "Vender para comprar", "La casa de mis sueños", "Tu casa a juicio" y otros espacios de viviendas ideales; comí helado; Exseminarista Ye-ye me hizo sonreír y también me hizo reír; madrugué algunos días y remoloneé otros; escuché música; tuve momentos de plena satisfacción; planté verduras en mi granja virtual, recogí verduras en mi granja virtual; pasé frío y después calor; me apunté en varias ofertas de trabajo, leí otras ofertas que me dieron la risa; le hice mimos a River; hablé de periodismo con jóvenes periodistas; jugué partidas de Apalabrados; bebí Baileys; me partí de risa viendo de nuevo "Dragones y Mazmorras" en la tele; comí comida china; leí reportajes y documentos aleatorios; hablé con amigos y con conocidos del pasado y del futuro; hice varios regalos; tiré bolígrafos sin tinta; me reí mucho con algunas personas y me entristecí mucho con otras; sentí vértigo; reinicié el móvil; pensé en hacer cosas que luego no pude hacer; fui a que mi médico me dijera que no había que amputar, que sólo era una fisura y cojeé a ratos; me dejé el pelo suelto y luego me hice coletas; me dieron ganas de llorar pero en otros momentos me reí bastante; intenté poner la mente en blanco y casi lo consigo; vi capítulos repetidos de "Castle" y vi capítulos muy repetidos de "Castle"; hice café; me cagué en algunas cosas y personas; saqué los pantalones cortos del armario; planeé vacaciones irrealizables por ahora; me hice un análisis de sangre; vi los informativos de la tele con indignación y tristeza; jugué con River; fui al supermercado; rechacé dos placajes de "voluntarios" de ONGs por la calle; di besos y abrazos; comí lentejas fritas; conduje por la autopista del sur; miré sonriendo a Exseminarista Ye-ye antes de dormir; tomé ibuprofeno; hablé con mi familia por teléfono; me vendé el pie malo con resultados poco satisfactorios; canté en el coche; comí perritos calientes; compartí enlaces y fotos en Facebook, Twitter e Instagram; viví, entre otras muchas cosas.
 
En general, ha sido una semana agradable, con algún toque amargo, en la que he llegado a algunas conclusiones que no puedo compartir aquí pero que estarán presentes a partir de ahora en mi periplo vital. Queridos lillusianos, disfrutad de la vida y todo lo negativo que no podáis cambiar intentad que no os afecte tanto como para arrebataros la ilusión.